23.11.09

DOS DÍAS

Señores del Jurado:

Como en repetidas ocasiones lo he dicho, si hay algo que realmente disfruto es dar clases, detesto todo lo demás, pero eso no es ninguna novedad pues siempre he sido honesta sobre los sentimientos encontrados que en mí fluyen cuando se trata de calificar exámenes o sacar promedios. Fuera de esto, la docencia me es grata.

Sin embargo, querido jurado, no puedo dejar de pensar en que dentro de dos días terminamos el semestre, tendré los exámenes finales (y todo lo que estos conllevan) pero seré libre, jurado, seré libre. Tendré que seguirme presentando en mi oficina, misma hora y mismo canal, sí. Pero estoy segura de que viviré mucho más tranquilamente que como lo he venido haciendo desde agosto de este año.

No espero su misericordia, espero tan sólo que no sean duros al juzgarme que tomen en cuenta que mi amor por las aulas es intenso durante el semestre y que, como todo apasionado amor, el nuestro requiere de un descanso.

Dos días, señores del jurado, dos días y ya.

4 comentarios:

mar adentro dijo...

El jurado opina que disfrutes estos dos días.

John Pluecker dijo...

El jurado dictamina que es totalmente injusto que una profesora tenga que presentarse en la oficina todos los días a cierta hora e irse a cierta hora. De hoy en adelante vienes y vas cuando quieras como la profe que eres.

Everardo Esparza Huizar dijo...

Se ve que llevas la docencia en la sangre, no en un portapapeles.

Lady of Shalott dijo...

uuuuun día!!!!