7.11.07

CAMPAÑA EN DOS FASES CONTRA EL DOS POR CIENTO

Inicié una campaña de lectura. Mi campaña roza tintes de humor y tintes bélicos. El objetivo no importa, bien podría ser que estoy en contra del maldito dos por ciento ese que tanto me caló o porque simplemente creo que leer beneficia la salud.

FASE 1:
Pegué en la ventana y puerta de mi oficina y en la de mi jefa, una hoja con letras gigantes que decía: LOS DIEZ LIBROS QUE TIENES QUE LEER ANTES DE CUMPLIR LOS VEINTE. Luego, venía la lista (que yo bien lista, estructuré y que yo más lista aún, no compartiré aquí). Al final en letras pequeñitas, como esas que vienen en los contratos y que uno no debe obviar, escribí: Si no sabes con cuál de estos libros empezar, visítame y de acuerdo a tu personalidad y signo zodiacal yo te diré cuál es el libro ideal para comenzar.

Mi campaña ha tenido un efecto divertidísimo. En primer lugar recibí visitas de alumnos que me dijeron, "ah sí yo ya leí tal o tal, y siempre he querido leer este que pone aquí", es decir, primero llegaron los ya lectores que no venían por recomendación y que incluso se quedaron a platicar de algún otro libro que no estaba en la lista y que ellos disfrutaron. En segundo lugar llegaron alumnos admitiendo que no habían leído ninguno de la lista y querían que yo les dijera cuál debían leer y que, además, no podían creer que aparte de poner acentos y escribir bien yo pudiera recomendar basándome en su signo (¿y puedes hacerlo? quizá me quieran preguntar ustedes pero ya dije que soy bien lista y no les voy a contestar, a menos de que me manden su signo). En tercer lugar, llegaron los profesores, hubo aquellos que ya habían leído uno que otro y coincidieron con que eran de rigor antes de los veinte, hubo aquellos que con cara de preocupación me dijeron "¿y si no los he leído?" y hubo otros que me ayudaron a que la lista creciera. El caso es que bajita la mano, de seguro tengo a un par de personas leyendo. Probablemente no tantos como quisiera pero, hey, es la primera fase.

FASE 2: Uno de los temas en mi clase de Sociedad y Desarrollo en México con mis chicos de profesional de sexto y séptimo semestre era literatura mexicana. Decidi que en vez de todos ponernos a leer un mismo libro los haría leer a todos un libro distinto basándome en lo que hasta ahora más o menos sé de ellos. ¿Resultado? todos leyeron (no sólo porque serían evaluados sino por el bendito morbo de "¿por qué quería mi maestra que YO precisamente YO leyera esto?"). Un buen número de alumnos me dijeron que le atiné, que el libro no sólo les había gustado sino que en efecto había algo en él un noséqué que les hacía sentir que estaba escrito para ellos. Hubo un otro número de alumnos que si bien no disfrutaron tanto ese libro en especial, sí fueron capaces de dialogar con el texto y fundamentar por qué no había logrado convencerlos y por puritito orgullo me dijeron: "ahora voy a leer el que leyó fulanito porque me lo platicó y se me antojó... qué gacha, ¿por qué no me puso a mí a leer ese?" Así que mi desatino no fue tan desatino.

La chinga, pardon my french, fue calificar la lectura. No, no iba a pedirles un reporte de lectura, ya ven que el copy-paste anda muy de moda en esta temporada. El día del examen escribí dos opciones de pregunta para cada libro leído por cada alumno, ellos tenían que elegir y contestar. Y sólo podría contestar, verdaderamente contestar, aquel que hubiera leído, verdaderamente leído el libro (le gustase o no).

Ya tengo planes para mi FASE 3.

Suelo ser demasiado optimista y quiero creer que algunos de mis alumnos buscarán más libros de ese autor y eso quizá los lleve a otros autores. Pero también soy consciente de que lo más probable es que algunos de estos nuevos lectores no vuelvan a tocar un libro jamás o, siendo menos dramática, quizá pase mucho tiempo antes de que vuelvan a tocar otro. Pero de seguro porlarazónquesea nunca lo olvidarán.

4 comentarios:

jose fá dijo...

En efecto: ¡Eres una LISTA!

Me dan ganas de abrazarte por tu empeño, me dan ganas de llorar... me emocionaste, pues

sylvíssima dijo...

josefa, lo siguiente es tema de post. ¿te acuerdas cuando nos escribíamos a mano con tinta y en papel blanco y las cartas cada tanto iban de mi lugar a tu lugar? podían pasar siglos pero cada tanto iba o venía una carta. y venos ahora. creo que nunca hemos estado juntas en una mesa con un café en mano, creo que nunca hemos estado más de un par de horas juntas, creo que en realidad nunca hemos habladohablado.

pero siempre, desde ese entonces que inició la correspondencia, he sentido que sí.

te abrazo, te abrazo mucho.

mar adentro dijo...

Soy Piscis...pero creo que ya me pasé del "antes de los 20's"...no importa, de seguro me faltan muchos libros por leer y tengo, igual que tus alumnos, mucha curiosidad por saber qué hay ahí para mí.

Guillermo Vega Zaragoza dijo...

Maestra, no sea díscola y comparta la lista, nomás para saber.

Saludos y gracias por tus posts.

Guillermo