Sangre cruz roja curación otro hospital puntadas tres.
Y así a cabeza abierta, las preocupaciones del hijo fueron las siguientes:
- pobres, los doctores casi no comen porque trabajan mucho, ¿no les podemos llevar una pizza?
- el señor que estaba al lado de mí tenía un tubito en su brazo y decía que él se había abierto la cabeza como yo muchas veces, ¿te imaginas?
- parece que los doctores querían ser peluqueros... chale, tan padre que tenía el cabello ya y me rasuraron.
- ¿qué vamos a cenar hoy?
- ya no estás asustada, ¿verdad?
El pequeño está en reposo, pensando una y otra vez que la razón por la cual el accidente no pasó a mayores se debe a tres cosas:
- A que rezó el padrenuestro muchas veces.
- A la pulserita de Jack (nightmare before xmas) que nunca se quita.
- Al dije ying-yang que cuelga en su cuello.
La fe de un corazón, también abierto, es increíble señores.
2 comentarios:
Creo que yo igual pensaba que esas mismas cosas me iban a proteger.
Como quisiera uno pensar igual que en ese entonces, todo lo hacíamos parecer taaaaan fácil.
No te preocupes syl, uno se tiene que romper la cabeza algún día.
Sylvia:
qué envidia tener una angel así de divertido en casa.
Espero que ya esté mejor ese de siete.
Saludos.
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