La pasividad de Federico se desvanece cuando llega a la palabra desarraigo. Lee una y otra vez la palabra, la oración completa. Siente una bofetada en el tiempo. Es incapaz de seguir leyendo. ¿Es eso entonces lo que siente desde hace unos años?
Federico se levanta y abandona el libro en la banca.
Huye de su certeza.
1.12.05
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