9.2.09

HISTORIA DE UNA FAMILIA

Notas mentales de una novelista que corre el riesgo de convertirse en la próxima Corín.

1) Dejar la primera persona, al menos a ratos, y reconsiderar y reconstruir la tercera persona (sin engaños) tomar el narrador-testigo y dejarse de sentimentalismos.

2) Lograr un equilibrio entre lo intelectual y lo emocional (no tocar, jamás, un extremo o el otro) (esto también le servirá para su vidapersonal).

3) Escuchar más a la intuición que está ahí, pegando de gritos sin ser escuchada.

4) Volver a los clásicos siguientes: Dostoievski, Platón, Jung.

4.1) Buscar nuevos clásicos: Calasso, Bosch, Strindberg y Hellinger.

5) Admitir de una buena y chingada vez que esta no es el libro memoria de una hermana, que es una novela.

5.1) Y que esta novela no es de una hermana es la historia de una familia.

6) Repetirlo como mantra: es la historia de una familia, es la historia de una familia, es la historia de una familia hasta que el posesivo mi, desaparezca por completo.

7) Repetirse como mantra: soy escritora, soy novelista, soy escritora, soy novelista. Soy.

8) Perder el miedo a los puntos 7, 5, 4 y 2 antes que otra cosa pase.

9) Perder el miedo a los otros puntos.

10) Admitir, ceder, aprender.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Gracias por este blog Sylvia, me gusta leerte, más si compartes el proceso de un nuevo libro.

José María dijo...

Interesantísimo decálogo.
Estaba traduciendo una entrevista con el director de cine coreano Hong Sang Soo y decía que considera cada una de sus películas como una esfera. El punto de vista lo pone el espectador y él puede decidir desde qué perspectiva verla.
Me ha llamado la atención tu interés en la tercera persona.
¡Ánimo!

José María dijo...

Problemas de ambigüedad referencial con los pronombres: en "él puede decidir", "él" se refiere al espectador, no al director.
Perdones.

sylvíssima dijo...

Lo entendí así José María, no ambigüedad referencial taken here.

Ahora bien, ¿algún día me platicarás cómo demonios llegaste a Corea y qué haces allá?

José María dijo...

Creo, Sylvíssima, que debería entonces a empezar yo también una novela.
Ahí va una pequeña pincelada informativa: entre otras cosas, traduzco y edito una revista que se llama KOREANA, que suelo citar en mi blog, y doy clases en la universidad.

sylvíssima dijo...

Pues a escribir se ha dicho.

José María dijo...

¡Ja, ja, ja!
¿No has oído, Sylvísima, el castizo dicho de "el que vale, vale, y el que no, enseña"? Ya puedes imaginarte al grupo al que pertenezco.
Por supuesto que hay excepciones, honrosas, pero no soy yo una de ellas.
Gracias de todos modos. Soñaré con ello.