El miércoles llegó la primer visita, la regiorosaritense. Y desde su arribo todo fue risas, carne (¡comí carne!), charlas largas, teorías literarias, científicas, culinarias y epistemológicas.
El viernes llegó la segunda visita, la philirosaritense. Y desde su arribo simplemente continuó lo anterior con el valor agregado que implica la semántica y la lingüística.
Estos fueron días y noches extraordinarios.
Los mejores desvelos en mucho, mucho tiempo.
30.3.09
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1 comentario:
cooon razón llegaste tarde hoy jsjsjs, te vi te vi te vi pro mi ventana del salón.
que bueno que comiste carne! ñaaaaaaam!
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